¿Alianzas o Rapsodias? en Guerrero 🧐.
En Guerrero, desde hace un par de meses la plancha se ha venido calentando. Todavía no sabemos (a ciencia cierta) si se tratará de una alianza o coalición formal, o si el acuerdo de unidad se llevará a cabo de manera discreta como un pacto de palabra que solo tendrá como garantía una promesa, de cumplir a cabalidad lo acordado.

Lo cierto, es que la tan mentada ‘Alianza’ implica muchísimas cosas, de entrada: que algunos partidos políticos (que han sido como el agua y el aceite) tengan que caminar juntos. Empatando así sus principios, ideologías y valores. Lo cual (hay que decirlo) tendrá su mayor dificultad y repercusión en la militancia, pues es esta, junto a los simpatizantes, quienes fortalecen con su decisión (el voto) a los partidos políticos con los que comulgan. Y es que: ¿Cómo el blanco, que siempre ha sido el blanco, que ha defendido a capa y espada al blanco, va a votar por el negro? ¡ESO NO! Sería como irle a las Chivas, y de un momento a otro, cambiarte y convencer a toda tu familia y amigos Chivas, de irle al América, de gritar sus goles y defender lo que representa.
Se viene la mezcla de la izquierda, el centro, la derecha, arriba y abajo; todas las direcciones habidas y por haber. Los ideales progresistas vs los ideales conservadores, la política de imposición (la de ‘dedazo’) vs la de ‘choque’. En fin: Toda la carne al asador, con un claro objetivo: Ganar la elección a como de lugar. ¿Raro?, tal vez; ¿complicado?, mucho; ¿necesario?, Sí, bastante.
Sin embargo, también se prepara otra alianza por parte de los simpatizantes de la cuarta transformación: MORENA + PVEM + PT. Hablamos de lo mismo: Ideologías y principios contrarios, tratarán de hacer equipo para llevarse la elección. Esto quiere decir, que por lo menos en nuestro Estado, la unión de las fuerzas es la llave para abrir la puerta y quedarse con la gubernatura, la mayoría en la cámara alta y baja, así como la mayoría en los congresos locales.
Sí, la política ha cambiado. El COVID–19 nos adelantó bastantes años del futuro, esto en consecuencia del aislamiento, la sana distancia y todas las medidas de sanidad emitidas por los organismos de salud locales, nacionales e internacionales.
Si me lo preguntan a mí, no podemos juzgar a la ligera a los dirigentes locales y nacionales, de sus decisiones. Pues lo hacen pensando en qué es lo mejor para la causa. Mejor, seamos agradecidos de vivir en la década más dinámica, mediática, cambiante y morbosa de la política en nuestro País…